Sin palabras es como me quedé cuando los colegiados del encuentro entre Alcobendas y País Vasco pitaron el final, y con una conclusión: el partido fue de gran nivel. Y es que por lo que he podido observar en estas tres jornadas, no creo que esta temporada exista un equipo que domine la clasificación de manera contundente, como lo hizo Obenasa Navarra la temporada pasada (sólo 2 perdidos en 28 partidos). La Liga está igualada y eso me gusta.
UPV se presentó en el Antela Parada con un equipo hecho por y para dos jugadoras: Novo y Sarr. Y ambas respondieron a la perfección a su cometido, eso sí, no lo tuvieron nada fácil. Alcobendas que recibía a las vascas como colíderes de la clasificación dominaron un encuentro que se les puso cuesta arriba, tan solo, tras a salida de vestuarios. Sin duda, una asignatura pendiente de las madrileñas.
Una derrota que deja a las alcobendenses sin imbatibilidad y en la mitad de la tabla. Ahora sólo dos equipos dominan la clasificación. UPV y el sorprendente Conquero. Quien le iba a decir al conjunto andaluz que después de jugarse la categoría la temporada pasada estuviera mandando en la clasificación. La frescura en el juego y sobre todo el acierto en los fichajes hace de Conquero un equipo a tener en cuenta, como al Tenerife Aguere del grupo A.
La tinerfeñas se han colado en el baile sin estar invitadas. Las chicas de Antonio Pernas están resolviendo de maravilla los partidos y están junto Pio, Burgos, Zamora y Bembibre comandando la clasificación de un grupo que no es nada fácil. Un equipo que, como Coquero, estuvo a punto de descender la temporada pasada y que ha sabido reinventarse.
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